Los actos de tortura a los que fue sometida Elvira Santibáñez Margarito, la joven de 22 años que fue grabada en un video mientras es interrogada con métodos ilegales por dos elementos del Ejército y una policía federal, en Ajuchitlán del Progreso, Guerrero, en febrero de 2015, podrían ser causal para que obtenga su libertad, puesto que un día después de los hechos se le fincaron cargos por portación de arma de fuego y está presa en el penal federal 16 de Morelos.
Expertos en derechos humanos y procuración de justicia, explicaron que cualquier evidencia que se hubiera obtenido en contra de la mujer, a través del maltrato del que fue objeto por parte de las autoridades, podría ser invalidada en caso de que la defensa así lo demuestre.
Incluso se puede recurrir a un amparo por las posibles violaciones al debido proceso, ya que fue puesta a disposición de la Procuraduría General de la República hasta la tarde del 5 de febrero de 2015, un día después de su detención.