FLORIDA.- Ocho pacientes de un asilo de ancianos fallecieron después de que el lugar se quedó sin aire acondicionado a causa del huracán Irma, lo que incrementó los temores el miércoles sobre la seguridad de los cuatro millones de adultos mayores que residen en Florida en medio de apagones que podrían durar días.
Los investigadores creen que los decesos en el Centro de Rehabilitación en Hollywood Hills están relacionados con el calor, dijo el jefe de policía de la localidad, Tom Sanchez, y añadió: “El edificio fue sellado y estamos realizando una investigación penal”.
El gobernador Rick Scott pidió a los trabajadores de emergencia que revisen de inmediato los asilos de ancianos y las instalaciones de vivienda asistida para asegurarse de que los pacientes estén a salvo. También ordenó una pesquisa a lo que describió como una situación “incomprensible”.
“Exijo respuestas”, tuiteó.
El asilo indicó en un comunicado que el huracán descompuso un transformador que proporcionaba electricidad para el aire acondicionado.
Se investiga la manera exacta en que ocurrieron los fallecimientos, y Sanchez dijo que las autoridades aún no han descartado nada, incluido envenenamiento por monóxido de carbono proveniente de los generadores. También comentó que los investigadores indagarán cuántas ventanas estaban abiertas dentro del asilo.
Al otro lado de la calle se encuentra el Memorial Regional, un hospital con aire acondicionado en funcionamiento.
“Es una situación triste”, reconoció Sanchez. “Todos tenemos a ancianos en asilos, y todos sabemos que dependemos de las personas en esas instalaciones para cuidar de la población mayor vulnerable”.
Los fallecimientos ocurrieron mientras los residentes que intentan reorganizar su vida en las zonas afectadas de Florida se enfrentan a una multitud de nuevos riesgos tras el paso de la tormenta, incluidos accidentes para remover árboles caídos y emisiones letales de los generadores.
Sin contar los fallecimientos en el asilo, al menos 17 personas han muerto en Florida por circunstancias relacionadas al paso de Irma, además de seis en Carolina del Sur y Georgia, muchas de ellas bastante después de que pasó la tormenta. En el Caribe la cifra total de víctimas se mantiene en 38.
Al menos seis personas murieron aparentemente por envenenamiento con monóxido de carbono proveniente de generadores en Florida. Un hombre en Tampa falleció después de que la sierra eléctrica que utilizaba para retirar árboles le rebotó y le cercenó la arteria carótida.
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