La realidad de las niñas en el estado islámico son una aberrante tradición impuesta en algunas culturas donde las menores no tienen ni voz ni voto y sus familias deciden con quien deben casarse.
Una pequeña de tan solo ocho años de edad murió en Yemen a causa de una hemorragia interna causada durante su primera noche de bodas con su esposo. Ahora, organizaciones de derechos humanos reclaman por el arresto del hombre que era cinco veces mayor.
El libanés Al Nahar, reportó que la muerte ocurrió al noroeste de Yemen, cerca del límite con Arabia Saudita. El hecho ha llamado la atención al igual que cientos más en donde realizan matrimonios forzados con menores de edad en el Medio Oriente.
El famoso bloguero Angry Man, publicó que el esposo era un “animal” y merecía ser severamente castigado por su crimen:
Todos aquellos que apoyen este tipo de crimen también deben ser castigados”, añadió. Otro internauta, escribió: “Los miembros de la familia de Rawan no son humanos. No merecen tener hijos”.
De acuerdo al Fondo de Población de las Naciones Unidas, Unfpa por sus siglas en inglés, entre el 2011 y 2020, más de 140 millones de niñas se convertirán en esposas. Además, de ese mismo número de niñas, 50 millones serán menores de los quince años de edad.
Se reportó que alrededor de un cuarto de las niñas yemenitas se casan antes de cumplir los quince años. En estas situaciones las menores no solo pierden acceso a educación y salud, sino que también son agredidas física, mental y sexualmente durante sus matrimonios.
Las tradiciones y la falta de una definición concreta para el término “niño”, conlleva a distintas interpretaciones en los diferentes países y estos, reciben muy poca protección. Algunas niñas terminan con niñas muertas a manos de sus esposos que las violentan o con ellas mismas suicidándose para no seguir viviendo una vida que no les corresponde a su corta edad.
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