Marjorie de Sousa y el actor mexicano Gabriel Soto no han dejado de sonar en la prensa rosa, luego de que la revista TvNotas hiciera pública unas comprometedoras imágenes donde se observa a la actriz venezolana y al actor compartiendo de lo más acaramelados en una playa de Cancún.

Aunque de Sousa y Soto han negado, en reiteradas oportunidades, que entre ellos  exista  alguna relación amorosa, quien al parecer no se ha tragado ese cuento es la esposa del galán, la actriz mexicana Geraldine Bazán, quien el pasado febrero contrajo matrimonio con el apuesto histrión.

Una fuente cercana a Bazán dio a conocer a la revista TvNotas que durante los diez días que los dos artistas estuvieron  en Perú se mantuvieron distanciados, mientras que Soto ha hecho lo imposible para que la estrella azteca pase la página.

“Gabriel (Soto) está tan desesperado por no perderla que recurrió a la brujería, mientras que ella ya está viendo lo del divorcio. No quiere saber nada de él”, contó el informante al referido magazine.

Es de recordar que, una vez que las fotografías vieron luz, la criolla fue atacada por los fanáticos de Bazán, quienes la volvieron trizas en las redes sociales. Al respecto, Bazán declaró que tiene castigado a su esposo, y que “Marjorie de Sousa no sabe nada de valores porque ella no es mexicana”.

Hasta ahora ni Bazán, ni Soto han confirmado la noticia del divorcio, que a sus allegados les cayó como un balde de agua fría, ya que la pareja se lanzó al agua el 11 de febrero tras ocho años de noviazgo y tienen dos hijas en común: Elissa Marie (6 años) y Alexa Miranda (2 años). Al parecer ha aparecido entre ellos una manzana de la discordia.