Debido a la pandemia por coronavirus todos nos vimos en la necesidad de usar cubrebocas para minimizar el riesgo de contagio. Al inicio se recomendaba solo para el personal médico o las personas enfermas, pero al paso del tiempo se recomendó su uso generalizado.
El uso masivo de mascarillas desechables provocó que se incrementara la basura y contaminación por este tipo de productos, por lo que algunos optaron por el uso de tapabocas reutilizables. Sin embargo, miles de personas aún usan los que son desechables, lo que ha generado un grave problema.
Los cubrebocas desechables tardan hasta 450 años en descomponerse y los pequeños fragmentos de plástico que contienen nunca desaparecen por completo, así lo advirtió el departamento de Medio Ambiente Marino de Bélgica.
Las máscarillas quirúrgicas están hechas de tela no tejida de polipropileno, producido a partir de etileno, el cual es un compuesto químico derivado del petróleo, es por ello que tarda tanto tiempo en descomponerse.
Las autoridades de aquel país informaron que se ha incrementado el hallazgo de mascarillas, guantes y botellas plásticas de desinfectante de manos en las playas y el mar, de acuerdo con el Servicio Federal de Salud Pública de Bélgica.
Hay que tener en claro que las mascarillas pueden evitar contagios y salvar vidas, pero si terminan como desechos en el mar, ponen en grave peligro a la vida marina.
El departamento de Medio Ambiente Marino explicó que diversos animales marinos pueden confundir los cubrebocas en el mar, con otras especies, como las medusas. Al tragarlos, sus estómagos se llenan y se sienten satisfechos, pero al no haber ningún suministro de nutrientes, se debilitan a largo plazo.
Además, los animales también pueden enredarse en las máscaras y, si lo piensas detenidamente, si los peces las comen, esas micropartículas que componen los cubrebocas podrían terminar en tu plato.
¿Cómo desechar correctamente un cubrebocas?
Si queremos protegernos del coronavirus pero sin crear un nuevo problema de contaminación en los mares, debemos desechar los cubebocas en un contenedor especial, o si lo prefieres, usar una mascarilla reutilizable.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda tirarlas en un contenedor de basura adecuado (cerrado). Lo mejor es colocar el cubrebocas en una bola de plástico antes de tirarlas al bote de basura cerrado, para evitar que los animales las abran o que el viento se las lleve a otro lugar, reduciendo así el riesgo de propagación del virus.
Mantente informado las 24 horas, los 7 días de la semana. Da click en el enlace y descarga nuestra App!
