Reynosa, Tamps.- Bajo el título “Productos “milagro”, ni son medicamentos ni son milagrosos, ¡Son un fraude!”, autoridades del Sistema de Salud del Estado de Tamaulipas, lanzaron una alerta general a la población para que eviten el consumo de dichos artículos, publicitados como productos para bajar de peso sin necesidad de ejercicio o intervenciones quirúrgicas, que curan enfermedades como la diabetes o el cáncer, que revierten la impotencia, que evitan la caída del pelo, y otros más.
En el folleto que se difundió en la página oficial de la SST, se indica que “el usuario debe tener criterio y sentido común y no fiarse de productos que prometen maravillas frente a enfermedades de difícil tratamiento (cáncer) o frente a la obesidad sin hacer dieta.
En caso de duda, confíe en su médico, principal interesado en recetar sólo productos que ofrezcan las máximas garantías sanitarias, pues su prestigio profesional está en juego.
Y recuerda… ¡Si algún producto te ofrece soluciones rápidas y milagrosas, debes desconfiar!”.
Los productos “milagro”, según la definición de la Secretaría, “son una serie de productos o tratamientos que se comercializan con la finalidad de prevenir o tratar ciertas enfermedades o padecimientos, así como trastornos, modificación del estado físico, etc., sin haberse sometido a ensayos y controles clínicos, así como a protocolos de investigación; suponen en algunos casos un fraude para los consumidores”.
Enseguida, enlista las características de los productos “milagro”:
-El producto se vende en infomerciales.
-Es vendido también en lugares de medicina alternativa o naturista y se hacen llamar medicamentos.
-En su publicidad aparecen testimonios y/o anécdotas.
-El producto dice que cura una cantidad grande de enfermedades.
-Utiliza a una celebridad o un deportista anunciando el producto.
-Se dicen llamar antiguos o milenarios.
-Afirman estar comprobados con estudios científicos, pero en ningún lado muestran los resultados de algún laboratorio específico.
-Prometen curar la diabetes, eliminar el cáncer o solucionar el VIH (Sida), y eso no se logra con un producto, es necesario un tratamiento indicado por un especialista.
“La creciente necesidad de la población de buscar métodos de salud alternativos ha propiciado una creciente oferta de los llamados “productos milagro” anunciados en los diferentes medios y de fácil acceso, sin necesidad de ser indicados por especialistas de la salud.
Esto sin duda representa grandes riesgos a la salud de los consumidores a largo, mediano y corto plazo por sus efectos secundarios”.
Los mitos más frecuentes en torno a este tipo de productos:
MITO 1: Con estos productos se puede perder peso sin hacer ejercicio y sin dejar de comer.
REALIDAD: Sólo con ejercicio y una dieta balanceada es posible bajar de peso.
MITO 2: Prometen solucionar una gran cantidad de enfermedades, desde las simples hasta las más delicadas y complejas.
REALIDAD: Con seguridad perjudicarán diferentes funciones naturales del cuerpo humano y si llegan a dar una solución al problema será de forma temporal.
MITO 3: Te ahorrarás fuertes cantidades de dinero al evitar comprar medicinas indicadas por un especialista de la salud.
REALIDAD.
Te podría ocasionar mayores gastos para solucionar problemas que se generen a partir del consumo de estos productos.
MITA 4: Los resultados serán similares a como los presentan en sus imágenes publicitarias, prensa, folletos, etc.
REALIDAD: Las imágenes que presentan en sus publicidades son de modelos o artistas que no han utilizado el producto que promocionan.