ESTADOS UNIDOS.- Se esperan muchas confusiones para 2018, cortesía de la nueva regla. Para esta tarde, con 13 partidos por disputarse en la semana inaugural, los pañuelos volarán en todos los emparrillados.
Y es que no es tan fácil. La temporada inició con un gran problema: Los jugadores no saben qué hacer con el casco y nosotros te lo explicaremos.
El incremento de conmociones cerebrales y las enfermedades relacionadas con golpes en la cabeza provocaron que la NFL prohibiera a cualquier jugador bajar la cabeza para hacer contacto con el rival.
Para los defensivos, la regla se ha vuelto como un problema matemático jamás resuelto.
Todo el mundo está confundido respecto a la nueva regla de cascos de la NFL, que tiene el potencial de convertirse en un desastre, ya que al ser subjetiva, quedará en el juicio inmediato de los réferis si se lanza pañuelo o no. El castigo es de 15 yardas y probable expulsión.
Durante la pretemporada, jugadores y entrenadores se frustraron con la forma en la que los árbitros no pudieron definir cuando una tacleada no violaba la nueva regla de la NFL.
A lo largo de las recientes semanas, varios jugadores han criticado la decisión de la Liga, al enfatizar que la regla no es armónica con los movimientos dentro del campo.
“Habrá momentos en que los jugadores atacarán con su hombro, como deberían, pero el hecho es que su cabeza está delante de su hombro. Si hubiera una manera en que alguien pudiera echar la cabeza hacia atrás y dirigirse sólo con su hombro, estoy seguro de que lo haría, pero tu cuerpo no funciona de esa manera”, declaró Richard Sherman, cornerback de los 49ers de San Francisco.
Los defensivos cargarán con la mayoría de los castigos, que prometen a partir de los análisis de esta noche, un montón de horas de comentarios que argumentarán cuando es castigo o no.
Lo cierto es que el football violento va mutando a un deporte menos agresivo, pero confuso.
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