Dos columnas de cemento con libros encapsulados y moldeados del artista peruano Ishmael Randall-Weeks, cotizadas en 12 mil dólares; un óleo del cubano Wilfredo Lam, titulado Les oiseaux voilés, que la galería Gary Nader vende en 4 millones de dólares; al menos una pieza del artista y activista chino Al Weiwei y tres espejos del artista indio Anish Kapoor, valuados en promedio en 650 mil libras esterlinas, son algunas de las obras que 122 galerías y 27 estudios de diseño presentan en Zona Maco, la feria de arte contemporáneo más importante de América Latina que ayer fue inaugurada y abierta a todo público.

El encuentro que se realiza desde 2002, cuando nació en Monterrey con el nombre de Muestra, ofrece obra de galerías provenientes de París, Milán, Madrid, Miami, Nueva York, Tokio, Lisboa y Berlín, que presentan trabajos de otros creadores, como Fernando De Szyszlo, Fernando Botero , Rufino Tamayo, Diego Rivera, Damien Hirst, Jannis Kounellis, Almudena Lobera, Leonora Carrington, Dr. Lakra, Francisco Toledo, Daniel Lezama, Eugenio Ampudia, Hong Yi y Yigal Ozeri.

Zona Maco se ha consolidado como una de las plataformas más importantes para venta y exposición del arte contemporáneo internacional. La oferta se divide en cinco áreas: General, Nuevas propuestas, Zona Maco Sur, Arte Moderno y Zona Maco Diseño. Todas las obras exhibidas fueron elegidas por 10 especialistas de diferentes áreas.

Entre piezas esculpidas en madera, bronce, diseños en plata y un sin fin de óleos —algunos de gran tamaño, como el tríptico Conductores, de Daniel Lezama, que miden 3.20 x240 centrímetros cada pieza, y que está valuada en 240 mil dólares—, hay fotografías, piezas de diseño e instalaciones, como la de Tania Candiani, que incluye enormes pencas de nopal de la que extraen la grana cochinilla con la que se tejieron cuadros de manta con diversos motivos.