Bien lo dijo el filósofo griego Diógenes: “La cultura es un saber del que no tiene uno que acordarse, fluye espontáneamente”, y es por esa razón es bueno que los pequeños naden en el mar de la cultura, aquel que enriquece su conocimiento y por qué no decirlo desahogar los problemas de casa.
Las familias que habitan la colonia Infonavit lo han podido palpar por su propia experiencia, al llegar las 2 de la tarde los padres de familia junto con sus hijos comienzan a llenar las instalaciones de la Casa de la Cultura Polivalente.
Algunos acuden al área de computadoras donde gratuitamente reciben cursos de informática o sí así lo requieren pueden utilizar estas para realizar sus tareas, algunos otros jovencitos acuden a la biblioteca anexa para leer un poco y dejar volar su imaginación.
Las madres de familia llenan el lugar a la espera de que sus hijos terminen su clase de papiroflexia o pintura, ellas se notan alegres pues saben que están aportando en brindarles una experiencia llena de satisfacción para los pequeños.
A partir de las 6 de la tarde, el recinto se convierte en un pequeño Palacio de Bellas Artes donde comienzan a llegar jovencitas para sus clases de danza, llenas de disciplina, energía y entusiasmo, es así como ensayan cada paso.
Que mejor forma de pasar la tarde con sus hijos, en una biblioteca o en alguna clase artística donde los padres observan atentos la alegría que irradian sus pequeños en estas actividades.