Después de que el Grupo Intermodal México, empresa filial de Ferromex y responsable del traslado de combustóleo en Manzanillo, reconociera que entre los últimos días de julio y los primeros de agosto se derramaron entre 50 mil y 80 mil litros del hidrocarburo en una zona de manglar de la laguna de Cuyutlán, el gobernador colimense, Ignacio Peralta Sánchez, exigió a Pemex reparar el daño causado por este incidente.
El mandatario informó que ya sostuvo una reunión con personal de Petróleos Mexicanos donde solicitó que se realice una investigación para deslindar responsabilidades y se expliquen a detalle los protocolos de seguridad que se siguen para el manejo del hidrocarburo y otros materiales peligrosos a su paso por el puerto.
Indicó que por ahora la prioridad es atender la contingencia para evitar mayores daños en el cuerpo de agua y después determinar en qué punto del traslado del combustible ocurrió el incidente.
Peralta refirió que serán instancias como la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca las que determinarán el nivel de daño en la laguna, lo que podría afectar al menos a un centenar de familias de pescadores de la zona.
Por su parte, la presidenta municipal de Manzanillo, Gabriela Benavides Cobos, indicó que el ayuntamiento contratará un peritaje ecológico para determinar las reales afectaciones de este incidente, que hasta ahora ha sido minimizado por las empresas involucradas.
Además, con esta investigación la administración municipal busca también detectar si Pemex, Ferromex o la Comisión Federal de Electricidad son responsables del incidente ambiental, pues aunque las tres reconocen lo ocurrido, hasta ahora no han dado explicaciones al respecto y mucho menos han asumido alguna responsabilidad.
Desde el 2 de agosto algunos pescadores de la laguna denunciaron la presencia del hidrocarburo en el cuerpo de agua y aunque en un principio se informó que el derrame había ocurrido por la fractura de uno de los ductos de Pemex que alimenta a la planta termoeléctrica de Manzanillo, esta información no ha sido del todo confirmada ni negada por las autoridades.
Según Benavides Cobos, incluso hay información de que el derrame comenzó desde el 23 de julio pasado sin que ninguna de las empresas involucradas hicieran algo por contenerlo.