La gimnasta mexicana, Kimberly Salazar, es una de las promesas de la disciplina a nivel nacional ya que ha destacado en Olimpiadas Nacionales; sin embargo, no cuenta con el apoyo suficiente para participar en eventos importantes.
Y es que la gimnasta, de 13 años, consiguió su pase para el Panamericano de Gimnasia Ritimica que se llevará a cabo en Daytona, Estados Unidos, del 10 al 15 de octubre, pero para poder ir necesita los fondos suficientes, por lo que se ha visto obligada a vender calendarios para conseguir su objetivo.
Residente de la Ciudad de México, donde se entrena en las instalaciones del Centro Nacional de Alto Rendimiento, la niña multimedallista en las Olimpiadas Nacionales se encuentra en el Club de Oro Veracruz, donde ya ha logrado vender algunas decenas de sus calendarios.
Este no es el primer caso de falta de apoyo para los deportistas mexicanos, ya que el caso de Kimberly se une al de Emilia Becerril, otra promesa de la gimnasia que no podrá asistir al Mundial de la especialidad en Bulgaria debido a la falta de apoyo de la Conade.
Otro caso es que el que suscitó el año pasado con los boxeadores participaron en los Juegos Olímpicos de Río 2016, quienes tuvieron que recurrir a diversas actividades para recaudar los fondos necesarios, como ‘botear’ en el transporte público.
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