A solo 45 días de la fecha límite, los funcionarios del condado se encuentran en controversia acerca de qué hacer para reducir el número de déficit para el presupuesto del próximo año.
El pasado lunes en la junta del Condado, fueron puestas sobre la mesa tres opciones por el auditor del condado, Leo Flores.
La primera es la de aumentar los costos de agua, aumentar las tarifas por el campo de golf y agrupar los planes de salud para los empleados.
Sin embargo, cada departamento obtendría un recorte del 10 por ciento.
“Va a haber muchos empleados que pienses que sus departamento no deberían ser recortados. Estamos pensando en hacer cumplir los recortes. Vamos a ver qué pasa”, señaló el comisionado John Galo.
Flores afirma que el condado presenta un déficit de $5 millones, pero los oficiales de presupuesto señalan que es de $8 millones.
En cuanto a los recortes de departamento, una sugerencia es que cada jefe de departamento deberá manejar los recortes.