El juego es algo más que sólo diversión para tus hijos, de hecho es una de las formas en que ellos aprenden quiénes son, cómo deben comportarse, de qué manera funciona el mundo y cuál es su lugar en él. ¿Qué asombroso, no?
Así mismo es importante que tus hijos jueguen porque al hacerlo incrementan su confianza, desarrollan habilidades sociales, su lenguaje y comunicación, además de que es algo que los hace sentir felices de acuerdo con expertos del Royal Children’s Hospital Melbourne.
Pero, más allá de todos estos beneficios que se dan a largo plazo, hay formas en las que jugar ayuda a que tu hijo tenga un mejor día. A continuación te presentamos 5 de ellas, ¡presta atención!
#5 Hará con más facilidad la tarea
20 minutos de actividad física, como jugar baloncesto o saltar la cuerda, antes de que tu hijo comience a hacer la tarea puede ayudarle a tener mayor concentración. Además el juego es excelente para que se relaje del estrés del día.
#4 Estará de mejor ánimo
Jugar puede hacer que tu hijo desarrolle una mejor actitud en el día, ya que, como en todo ejercicio, su cuerpo libera sustancias químicas que lo hacen sentirse feliz y al mismo tiempo le dan un impulso de energía que le dura por mucho tiempo.
#3 Fortalecerá el lazo con sus amigos
Nada mejor para los niños que jugar con otros pequeños para relacionarse de manera natural y hacer fuertes lazos. Así que formar parte de un equipo deportivo, por ejemplo, es algo estupendo para que tu hijo pase momentos de diversión con sus amigos y tenga un gran día.
#2 Mejorará su equilibrio físico
Los niños son muy propensos a sufrir lesiones en las rodillas o extremidades, pero jugar es una excelente manera de que la flexibilidad de sus articulaciones mejore, así como su equilibrio y coordinación, de acuerdo con la información de la American Heart Association.
#1 Dormirá más profundo
Debido a que el cuerpo y cerebro de tu pequeño se comunican, al estar físicamente activos durante el día, el organismo envía el mensaje “estoy cansado” en lugar de “todavía estoy despierto” cuando se va a la cama; su sueño será mucho mejor.
Por todas estas razones y muchas más, es importante que permitas que tu hijo juegue todos los días, aunque sea durante 30 minutos. En poco tiempo verás que será un niño (o niña) más feliz. En la medida de tus posibilidades tómate el tiempo para participar en sus juegos.