LUISIANA.- Aplicando la de “tráiganme una urna que lo vuelvo a votar, es exactamente lo que voté”… un hombre que votó por Donald Trump ha generado polémica al asegurar que no se arrepiente de su decisión, pese a que su esposa fue arrestada por autoridades migratorias en Estados Unidos al regresar de su luna de miel.
Bradley Bartell, ciudadano estadunidense, y Camila Muñoz, ciudadana peruana, fueron detenidos por oficiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) cuando regresaban de su luna de miel en Puerto Rico.
Muñoz ingresó a Estados Unidos en 2019 con una visa de trabajo y estudio durante el inicio de la pandemia del COVID-19. Aunque su visa ya había caducado, se encontraba tramitando su residencia permanente tras contraer matrimonio con Bartell.
Sin embargo, al aterrizar en territorio continental estadunidense, Muñoz fue cuestionada sobre su estatus migratorio. Cuando informó que estaba en proceso de obtener la residencia, fue inmediatamente detenida. Actualmente permanece bajo custodia del ICE en un centro de detención en Luisiana.
“Ha sido una pesadilla, la verdad, aceptar las cosas como vienen y seguir adelante”, relató Bartell en entrevista con Newsweek. “Tenemos un abogado. El sistema para procesar a la gente parece ser muy ineficiente, por lo que está tardando más de lo debido”.
Pese a la compleja situación, Bartell afirma no arrepentirse de haber votado por Trump, quien durante su mandato ha implementado medidas migratorias más estrictas. “No me arrepiento de haber votado”, declaró tajantemente Bartell. Al compartir su historia públicamente, Bartell ha sido blanco de críticas y señalamientos por parte de quienes consideran contradictorio su apoyo al presidente, dada la situación de su esposa.
“He recibido muchos mensajes de odio, mucha gente diciendo que nos merecemos esto. Y muchos otros insultos”, reconoció.
Bartell ha expresado críticas hacia ICE por lo que considera “un sistema defectuoso”. “Parece que el ICE nunca tiene información. El sistema necesita una modernización para mejorar los procesos y la comunicación entre departamentos”, afirmó. Aunque reconoce las limitaciones del sistema migratorio estadunidense, mantiene su postura favorable al presidente.
“Él no creó el sistema, pero sí tiene la oportunidad de mejorarlo. Esperemos que toda esta atención saque a la luz lo defectuoso que está”, explicó Bartell.
Bartell y Muñoz se conocieron en Wisconsin Dells, donde la joven peruana trabajaba en agricultura y hostelería. Tras casarse, la pareja tuvo que aplazar su luna de miel debido a las restricciones de viaje por la pandemia, hasta que finalmente lograron realizarla en febrero de este año.
El impacto de la detención de Muñoz ha llevado a Bartell a considerar opciones extremas, incluida la posibilidad de mudarse a Perú en caso de que su esposa sea deportada.
“He pensado mudarme a Perú si la deportan, pero sería muy difícil para mi hijo”, señaló.
Las autoridades migratorias han defendido sus acciones. Un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional declaró que “gracias al presidente Trump volvemos a ser un país de derecho” y agregó que deportarán a quienes permanezcan ilegalmente en Estados Unidos, priorizando a los criminales y a quienes ya cuentan con órdenes definitivas de deportación.
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