CUBA.- El periodista independiente y vicepresidente regional por Cuba de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Henry Constantín Ferreiro, fue declarado libre de cargos tras presentarse el 27 de febrero ante la Fiscalía de Camagüey para escuchar una imputación en su contra, informó hoy la SIP.
Constantín, director de la revista “La Hora de Cuba”, fue detenido el 20 de febrero en la provincia de Camagüey y mantenido incomunicado casi dos días. Durante su cautiverio fue inculpado por sus captores por el delito de propaganda enemiga e intimado a dejar el país y citado por la Fiscalía para comunicarle formalmente las acusaciones, afirma la Sociedad Interamericana de Prensa en un comunicado.
“El periodista y la corresponsal en Camagüey del portal 14 y medio, Sol García Basulto, fueron detenidos en el aeropuerto de Camagüey donde se disponían a tomar un vuelo hacia la capital cubana. García Basulto fue liberada horas más tarde, mientras que Constantín Ferreiro fue retenido en la Unidad Territorial de Investigaciones Criminales y Operacionales en Camagüey. El operativo para las detenciones fue realizado de manera conjunta por agentes de la Seguridad del Estado y la Policía Nacional Revolucionaria”, dice la SIP.
En solidaridad con el periodista cubano la SIP pidió a Estados Unidos y a la comunidad internacional interceder por la injusta acusación. El presidente de la organización, Matt Sanders, envió una carta a la directora de la Casa Blanca para Asuntos de los Medios de Comunicación, Helen Aguirre Ferré, solicitando el respaldo del presidente Donald Trump por el caso del periodista.
Sanders, director senior y gerente general de Deseret Digital Media, de Salt Lake City, Utah, reiteró, además, que se incluya en la agenda bilateral con Cuba el tema del respeto a las libertades de prensa y expresión.
Entre la supuesta evidencia para acusar a Constantín Ferreiro de propaganda enemiga se mencionó la revista confiscada, cuyo contenido incluye un artículo sobre el control del ganado vacuno por parte del Estado, algunas crónicas sobre el patrimonio histórico y cultural de Camagüey y una nota de opinión en la que se escribió que Raúl Castro se estaría convirtiendo en un dictador bueno.
En nueve ocasiones, entre el 2016 y 2017, Constantín Ferreiro ha sido interrogado sobre motivos de viaje, vigilado, amenazado, padecido agresiones psicológicas y represalias, retenido en su lugar de residencia y requisadas su laptop, teléfono móvil, libros y memorias flash.
Otras ocho personas, incluyendo a los padres de Constantín Ferreiro, periodistas, colaboradores y fuentes periodísticas vinculadas a La Hora de Cuba, revista que se autodefine como “un medio de comunicación y proyecto cultural hecho desde Cuba para el mundo”, han sido asediados, amenazados y detenidos arbitrariamente desde 2015.
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