Un prototipo de biosensor que mide los niveles de glucosa en la piel, sin necesidad de extraer sangre del paciente, fue diseñado por tres estudiantes de la maestría en física de materiales que ofrece el Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE) en forma conjunta con el Centro de Nanociencias y Nanotecnología (Cnyn) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El dispositivo en forma de pulsera, al estar en contacto con la muñeca del usuario y por medio de tecnología de comunicación de campo cercano (NFC, por sus siglas en inglés) y una aplicación para dispositivos móviles (app), transmite la información del nivel de glucosa del portador a un teléfono inteligente.
“Es un glucómetro en sí, medimos la concentración de glucosa que está en la piel, esa concentración de la piel es exactamente la misma de la sangre, entonces nosotros, por medio de un método químico, extraemos la glucosa, se aplica un potencial entre dos electrodos durante tres minutos y luego, ya que se extrae la glucosa de la piel, hacemos una medición química también”, explicó José Antonio Tejeda Rodríguez, uno de los estudiantes que diseñaron el prototipo.
En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, precisó que la medición que hace el dispositivo es muy exacta, ya que tiene un margen de error mínimo, similar al de los glucómetros tradicionales; sin embargo, también brinda la opción de compartir la información con otras personas, gracias a la aplicación para dispositivos móviles.
La pulsera además ofrece la posibilidad de ser programada para que esté realizando mediciones periódicas al paciente y almacena los datos recabados para llevar un registro en la app del celular, en donde se despliega la información.
– Innovación empresarial con impacto social
El proyecto en el que participan, además de José Antonio Tejeda, David Shimomoto Sánchez e Iván Antonio Peralta Mendoza, obtuvo en junio el Premio Santander a la Innovación Empresarial 2016.
El concurso fue pieza clave para incentivar a los estudiantes a trabajar a partir del tema de tesis de maestría de David Shimomoto y concretarlo en el prototipo que compitió con más de mil proyectos de negocio desarrollados por estudiantes de universidades de todo el país.
José Antonio Tejeda comentó que uno de los requisitos para participar en el concurso es elaborar un plan de negocios y contemplar el impacto social del proyecto, lo que dio pie a la búsqueda de estadísticas relacionadas con la diabetes.
“Básicamente los datos que nosotros sacamos son de la federación internacional de diabetes y se identifican en 2015 a 11 millones de mexicanos con diabetes y dan un estimado de que cada año se incrementan 300 mil nuevos casos, entonces es una problemática bastante real y bastante grave en la cual pudimos incursionar con la generación de este biosensor”, puntualizó.
Aclaró que si bien la elaboración del plan de negocios comprueba la factibilidad del proyecto, el dispositivo todavía no está listo para ser lanzado al mercado; no obstante, continuarán haciendo ajustes y mejoras al prototipo.