SAN JOSÉ, Costa Rica.- El municipio guatemalteco de Villa Nueva, uno de los asentamientos urbanos más violentos, populosos y marginados de Centroamérica y un territorio sacudido por el diario asedio criminal de las maras o pandillas juveniles, vivió este miércoles un desastre natural con saldo de nueve muertos, cuatro heridos y un niño desaparecido tras un deslave por intensas lluvias que derribó un muro e hizo caer un furgón sobre una hilera de viviendas.
El dolor de las familias y demás pobladores cunde en esa zona que desde hace más de 15 años es una fortaleza de las maras Salvatrucha 12 y 18 y que todos los días sufre muerte y violencia por la incesante inseguridad.
Ubicado en el sur del central departamento de Guatemala, que alberga a la capital del país, este municipio es uno de los más grandes dormitorios de las poblaciones que engrosan la economía informal de la nación.
La emergencia comenzó la noche del martes y los vecinos reportaron “viviendas soterradas” por la saturación de agua, informó la estatal Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred).
En un recuento de hechos que entregó a EL UNIVERSAL, Conred precisó que “la acumulación de agua en los suelos ocasionó un deslizamiento que generó daños severos y pérdidas humanas en viviendas” de la colonia Santa Isabel 2, de Villa Nueva.
Las tareas de socorro se concentran en buscar, localizar y recuperar los cuerpos de ocho de las nueve víctimas mortales, ya que una pereció en un hospital del área, subrayó.
Ante la intensa fuerza del deslave, cedió un muro de contención instalado en un estacionamiento para vehículos de carga de una empresa privada y uno de los furgones fue arrastrado y cayó en las casas, según Conred. La corriente atrapó a un niño de 8 años que está desaparecido y cuya búsqueda prosigue.
“Los minutos de gritos y desesperación fueron seguidos de horas de desolación entre las víctimas del deslizamiento”, describió este miércoles Prensa Libre, el principal diario de Guatemala, en su edición digital.
El municipio declaró inhabitable el sector de la tragedia porque hay cerca de 500 personas y un centenar de viviendas en riesgo. Más de 30 familias permanecen en un albergue para su asistencia humanitaria. Se declararon tres días de duelo.
Conred confirmó que las fuertes lluvias han afectado a gran parte del territorio guatemalteco. A la emergencia se añadió otro factor de inquietud: las erupciones que el volcán de Fuego, en la región surcentral de Guatemala, que se reanudaron antenoche.
Aunque la actividad volcánica mermó, el Fuego “mantiene explosiones moderadas generando columnas de ceniza” a una altura aproximada de 4 mil 800 metros sobre el nivel del mar que se desplazan a más de 10 kilómetros en dirección oeste y suroeste, informó el estatal Instituto de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala. Según datos oficiales, sin contar la tragedia de ayer, la temporada de lluvias iniciada en mayo pasado ha provocado 141 incidentes, 173 mil 685 afectados, mil 466 damnificados, así como daños a miles de viviendas.