Nuevo Laredo.- Dentro del Panteón Municipal Antiguo de Nuevo Laredo se encuentran tumbas de grandes personajes destacados en la Revolución Mexicana.
Unos de los restos que permanecen en este panteón, es el de María de Jesús de la Rosa “La Coronela”, una mujer revolucionaria que llegó a Nuevo Laredo en 1920, y quien donó en 1956 una manzana de su propiedad para que se construyera una escuela, que actualmente lleva su nombre, sin embargo, el 12 de enero de 1957 fue cuando en un incendio murió y en Octubre del mismo año empezó la edificación de esta escuela.
Otro personaje que participó en la Revolución Mexicana fue el General Reynaldo Garza, quien inició su participación en 1911, además fue diputado al Congreso Constituyente de 1917.
Obtuvo el grado de general brigadier, siendo jefe de arma en distintas partes del país. Fue un 8 de septiembre de 1944 cuando Reynaldo Garza Martínez falleció en esta ciudad fronteriza, siendo entonces presidente de la Unión de Veteranos de la Revolución.
También aún permanece en este cementerio una loza que era de la tumba del general Lucio Blanco, aunque sus restos ya fueron exhumados y sepultados en Saltillo, Coahuila. Blanco nació en Nadadores, Coahuila, y falleció ahogado en Nuevo Laredo el 7 de junio de 1922.
El cuerpo del general Maclovio Herrera, quien falleció el 17 de abril de 1915, permaneció 20 años en el cementerio, ya que sus restos fueron removidos hacia la Ciudad de México.
El Panteón antiguo, cuenta con un lote para los Veteranos de la Revolución, en donde están sepultados capitanes, sargentos, capitanes legionarios y mayores y generales.
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