MÉXICO.- “Este año se dejó sin fertilizante gratuito a más de 300 mil productores del estado de México, Puebla, Morelos y Tlaxcala, entidades a las que se dijo se apoyaría; sin embargo, la Secretaría de Agricultura a cargo de Víctor Villalobos, se quedó sin presupuesto y solo beneficio a campesinos de Guerrero”, afirmó el presidente de la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC), Isidro Pedraza Chávez.
Luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador, sostuviera en su Segundo Informe de Gobierno que tres millones de agricultores y pescadores están siendo apoyados con recursos de manera directa para cultivar sus tierras y que, de manera gratuita se les está entregando fertilizantes, además de que se logró establecer los precios de garantía para comprar a productores del campo, maíz, frijol, arroz, trigo y leche.
En respuesta a lo anterior, Pedraza Chávez aseguró que las afirmaciones del presidente carecen de veracidad en cuanto a logros alcanzados en el sector agropecuario y consideró que la recuperación de producción agroalimentaria se logrará con la cooperación de todos y alcanzar los niveles de crecimiento que se registraban hasta antes de la pandemia, afirmó.
“En el informe presidencial no hubo propuestas para reactivar la economía ni el sector primario, el cual cayó 2.5% en el segundo trimestre de este año con relación al trimestre que le precede, desapareció el apoyo a diésel y gasolina para la pesca y agricultura a partir de junio de este año con lo cual deja en indefensión al productor pues el porcentaje del estímulo que se aplica al IEPS de los combustibles que, para mayo, representaban para el diésel pesquero un 45.96% y para el agropecuario 36.76%”, comentó.
Refirió que la Secretaría de Agricultura no avanzó con los objetivos estratégicos para lograr la autosuficiencia alimentaria vía el aumento de la producción y productividad del sector, ni contribuyó al bienestar de la población rural mediante la inclusión de las productoras y productores históricamente excluidos en las actividades productivas rurales, aprovechando el potencial de los territorios y los mercados locales.
“Una prueba de ello es que las importaciones de granos y oleaginosas acumuladas en la primera mitad del año suman 17.23 millones de toneladas, lo que representa un alza de 4.6% contra las 16.47 millones de toneladas que se importaron en el mismo periodo de 2019; las importaciones de maíz son mayores en 4.9% con un volumen de 7.73 millones de toneladas; las compras del complejo de soya rebasan en solo 0.7% con 3.9 millones de toneladas de toneladas; las importaciones de trigo son más altas en 5.4%, con 2.3 millones de toneladas; mientras que suben en 18.0% las importaciones de canola con 662 mil toneladas; y las importaciones de frijol se incrementan en 8.5% con más de 54 mil toneladas al terminar los primeros seis meses del 2020”, refutó el dirigente de la UFIC.
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