Aunque las transacciones destinadas al consumo de drogas se realizan mayoritariamente en lugares físicos, el suministro a través de fuentes online crece a un ritmo acelerado, sostiene el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT).

 Jane Mounteney, responsable de la unidad sobre sustancias ilícitas y nuevas tecnologías de internet del OEDT, afirma que el aumento está impulsado por el incremento del uso de internet, el desarrollo de nuevas tecnologías de pago y las innovaciones para proteger la identidad de los usuarios.

La investigadora afirma que la preocupación se centra principalmente en la amenaza que entrañan los mercados de droga de la red oscura. Estos criptomercados, como AlphaBay o la desaparecida Silk Road, funcionan bajo características similares a eBay o Amazon, al permitir a los clientes buscar y comprar todo tipo de sustancias. Para eludir la ubicación física, los criminales emplean diversos instrumentos que garantizan el anonimato, como el programa Tor, que oculta la dirección del protocolo Internet (IP) de un equipo informático; y para disfrazar las transacciones, utilizan criptomonedas descentralizadas y relativamente imposibles de rastrear, como bitcoin y litecoin.

La mayor parte del mercado ilegal online corresponde a los productos de cannabis, seguido por la MDMA tipo éxtasis, que en conjunto constituyen cerca de 70% de las sustancias ofrecidas, aunque también se puede comprar heroína y cocaína. “Recientemente han añadido un elemento adicional de seguridad a sus operaciones, y consiste en que sólo se puede acceder por recomendación de otro usuario”, explica Mounteney.

De acuerdo con información extraoficial, en estos momentos operan unas 40 plataformas de venta online.

Pero la actividad de los criminales no se limita a la red oscura, también están presentes en la red superficial, donde, por lo general, venden nuevas drogas que se ofrecen como “sustitutos legales” de cannabis y de estimulantes como anfetamina. También están activos en las redes sociales, las cuales son usadas principalmente para intercambiar experiencias y descubrir nuevas sustancias sicoactivas.

“Si bien la mayoría de las transacciones de drogas ilegales se realizan en lugares físicos, internet goza de gran potencial”, subraya la experta.

Para buscar respuestas a lo que ocurre, el 7 y 8 de junio se reunirán en Bruselas expertos en delincuencia cibernética, miembros del sector de las tecnologías de la información y representantes de las instituciones de la Unión Europea. Participarán en el encuentro fuerzas policiales, expertos en la lucha contra la delincuencia cibernética y representantes de servicios de tecnologías de la información.