GUADALAJARA, Jal.- Ni la entrada de Alan Pulido, su debut en la Liga, ocultó el gran partido que dieron las Chivas Rayadas del Guadalajara, que derrotaron de forma contundente 2-0 a Jaguares de Chiapas.
El delantero de los 15 millones de dólares, entró al campo a los 59 minutos en lugar de Ángel Zaldívar, dejando ver sus buenas maneras, pero también su desesperación por anotar, lo que lo hizo actuar de forma precipitada y perder lo que bien pudo ser otro, u otros goles para el Rebaño, que con este triunfo se meten entre los mejores tres equipos del torneo, al arribar a catorce puntos, superando a su archirrival el América. Nada menos.
No cabe duda, el Guadalajara está de vuelta, lo que hizo en el Clásico no fue un espejismo.
Las Chivas son una realidad.
Aunque el rival no era un gran parámetro, Jaguares es de los peores equipos del futbol mexicano y a poco están de darle las gracias a José Cardozo como su técnico, el reto era demostrarlo en la cancha y así lo hizo el Rebaño.
Tomó comenzó temprano cuando Carlos Cisneros tomó un balón fuera del área para mandar un severo disparo que venció la estirada del portero Liborio Sánchez, ex de las Chivas (9’).
A partir de ese momentos el Guadalajara fue amo y señor del partido, mostrando un juego simple, tocar y moverse, siendo prácticos y efectivos, sin ir más allá de lo necesario, sólo mostrarse poderosos con quien debían hacerlo.
A pase de Michael Pérez, Isaac Brizuela amplió el marcador al coronarlo de gran forma (27’). “El Conejito” está en gran forma.
En la segunda parte Matías Almeyda hizo ingresar a sus veteranos: Carlos Peña, Néstor Calderón y finalmente a Alan Pulido.
El delantero al fin se mostró ante la gente del Guadalajara.
Pulido tocó el balón un total de quince ocasiones, pero sólo disparó a la portería en una ocasión.
A los 75 minutos anotó un tanto, pero antes de que pudiera festejarlo el árbitro lo anuló por fuera de lugar.
Cerca del final del partido fue cuando más se atrevió a mostrarse con jugadas individuales, con un quiebre dentro del área que le abrió la posibilidad de mandar un centro que no pudo cerrar nadie.
Ya en tiempo de compensación hizo un autopase y de nueva cuenta mandó un servicio raso que nadie pudo rematar a puerta.
Jaguares hizo poco durante todo el juego.
Se hizo notar que el plantel chiapaneco es corto y que la mayoría de los jugadores viven un muy mal momento, como lo demostró Javier Orozco, quien ha demostrado que sus mejores tiempos han quedado atrás, ya que tuvo sendas oportunidades para anotar, pero en todas estas demostró falta de técnica y sangre fría.
La entrada de Ayoví cambió la cara de Chiapas, pero cuando tuvo la oportunidad de marcar el portero Rodolfo Cota apareció con sendas atajadas para cortar los ánimos.
Al final Guadalajara fue mejor de cabo a rabo. El plantel al mando del argentino Almeyda simplemente vive su mejor momento en el torneo, porque a pesar de las bajas en defensa: Pereira, Salcido, Salcedo, etc., etc., ha demostrado que sus jugadores están al 100 por ciento.
Chivas es una realidad. Hay que tomarlo en serio.
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