CIUDAD DE MÉXICO.- Iñaki Landáburu Llaguno, Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Distribuidores de Vinos y Licores, señaló que la actual ley impositiva para bebidas alcohólicas en México, tal y como está, es una ley obsoleta, porque es un impuesto en cascada, pues paga el fabricante y paga el comerciante, por lo que es algo difícil de fiscalizar.
Destacó que hay un gran problema de subvaluación de productos en el sector de vinos y licores, y que es grave la subfacturación.
Enfatizó que existen empresas que teóricamente producen mezcales, bacanoras o tequilas, que no lo son porque no contienen la materia prima que la norma dice y que se anuncian con grados alcohólicos erróneos, por lo que una nueva ley impositiva con base a los grados alcohol y a primera mano es una forma en que el gobierno puede controlar mejor e incrementar sus ganancias.
Por ello, aseguró, que con un piso parejo, con una nueva tasa impositiva ayudaría al campo, al comercio y a todos los mexicanos, incluso al SAT.
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