NUEVO LAREDO.- Gracias a la oportuna reacción de un chofer de autobús, 20 pasajeros y él se salvaron de morir calcinados en su camino a esta frontera.
Una unidad que salió de Escobedo, Nuevo León, con destino a Nuevo Laredo quedó convertido en cenizas al incendiarse en la carretera en los límites con Tamaulipas.
Bomberos de de la subestación 4 de Nuevo Laredo Nuevo Laredo llegaron al lugar del siniestro para combatir las llamas, pero la unidad fue totalmente consumida por el fuego y sólo se observaban los fierros.
El autobús es de la línea Regiomontanos, y el operador fue identificado como Manuel Armando Rodríguez Guzmán.
De acuerdo con lo que señaló el chofer, el autobús se conducía de forma normal, pero repentinamente observó fuego en la parte trasera del vehículo por lo que se detuvo a la orilla del camino para los pasajeros bajaran y ponerlos a salvo.
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