PARÍS.- Angela Carini le pidió disculpas a la argelina Imane Khelif, boxeadora que está en vuelta en una polémica de género, por no darle la mano al final de su combate que se disputó el jueves 1 de agosto en los Juegos de París, donde la italiana se retiró entre lágrimas tras sólo 46 segundos de combate, en los que recibió varios fuertes golpes en el rostro.
“No era mi intención. En realidad, quiero pedirle disculpas a ella y a todo el mundo. Estaba molesta porque mis Juegos se habían esfumado, pero no tengo nada contra Imane Khelif. Al contrario, si la volviese a ver, la abrazaría”, mencionó Angela Carini a la prensa italiana.
Tras recibir un derechazo en el rostro, Angela Carini levantó el brazo y se dirigió a su esquina para hablar con el entrenador, que comunicó con las manos la retirada al árbitro.
El juez llamó al centro del ring a ambas boxeadoras y decretó el triunfo de Imane Khelif en este combate de peso wélter (entre 63.5 y 66.6 kg) mientras Carini se arrodilló entre lágrimas.
“No podía seguir. Me dolía mucho la nariz y dije: ‘Paren’. Era mejor no seguir”, relató después la italiana. “Podía haber sido el combate de mi vida, pero en ese momento tenía que salvaguardar mi vida también”.
Este viernes fue el turno del debut de Lin Yu Ting, quien aprovechó su mayor pegada y envergadura (1.75m de altura) frente a la uzbeka Sitora Turdibekova para imponerse por decisión unánime.
Las críticas a Lin y Khelif, quienes compitieron en los pasados Juegos de Tokio en 2021, se centran en que ambas fueron descalificadas del Mundial de boxeo de 2023 por no cumplir con los “criterios de elegibilidad”.
El COI ha defendido en varias ocasiones su decisión de permitirlas competir en los Juegos de París, asegurando que “está establecido que son mujeres”.
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