La tala de una hectárea de manglar rojo en México representa un costo de 650 mil dólares al año, tan sólo para la industria pesquera, sin contar con que su destrucción vulnera las costas del país ante huracanes, agudiza la erosión de playas y aumenta el impacto del calentamiento global.
De acuerdo con estudios del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav), en Mérida, Yucatán, una hectárea del mangle rojo en Quintana Roo mantiene cautivas o “secuestradas” 3 mil toneladas de carbono, evitando que se libere al medioambiente, subraya el investigador de la Universidad de California, en San Diego, Exequiel Ezcurra, quien añade que los manglares del Caribe son capaces de capturar “todo el carbono que se genera en el país, en un año”.
El científico habló del Día Mundial de los Humedales que se celebra hoy, para hablar del alto valor que poseen los manglares, ecosistema que “es defendido con leyes feroces en países como Estados Unidos, Inglaterra, Canadá, España y Francia, por ejemplo, y demeritado en México… no entiendo por qué”.
“En Florida la ley es feroz. ¡Cuidado con que toques un manglar, está prohibido tocar un solo metro cuadrado, olvídese una hectárea o 22″, mencionó el investigador.