En cuanto Abraham González apareció en la sala de llegadas internacionales de la Terminal Dos del AICM, fue rodeado por una multitud de cámaras, grabadoras y fotógrafos, para conocer sus inquietudes de venir a jugar para los Pumas.

“Vengo a una liga muy competitiva, y tenía muchas ganas de jugar en México, y qué bueno que es con Pumas, un equipo dinámico”, dijo emocionado el volante de 30 años.

Está enterado de que “Pumas es un equipo grande en el futbol mexicano, que tiene una infraestructura muy fuerte, y aquí estoy, dispuesto a dejar el mejor de mis esfuerzos por el bien de esta institución e iniciar bien el torneo”.

Acerca de la filosofía universitaria, Abraham señaló que “es un club que se preocupa por impulsar a la juventud, que tiene muchas escuelas formativas, y que la idea es producir jugadores, y en lo personal vengo a competir y ganar”.

Venir a los auriazules es un reto en su trayectoria deportiva, “pero vengo muy contento, dispuesto a responder a las expectativas. Estoy consciente que a todo extranjero se le exige, y en mi caso no tengo duda de que corresponderé, porque me ha interesado el proyecto que tiene Paco Palencia, de la misma institución, y todo eso me agrada. Pumas piensa en grande, tengo entendido que la garra es parte de su filosofía, y entonces hay que manifestarla desde ya”.

Abraham ya conoce a Paco Palencia, “alguna vez platiqué con él, cuando estaba en el Español, y en ese entonces me hizo comentarios a futuro de que algún día le gustaría dirigir, y mira, ahora tiene la oportunidad y estoy a sus órdenes para apoyarlo”.

El volante español también está enterado que los seguidores auriazules son exigentes, y ante esta situación  “me comprometo a dejar todo en la cancha, que por ganas y trabajo no quedarán, y en mi caso vengo para ser campeón, pienso en grande”.