ESTADOS UNIDOS.- Los hermanos Erik y Lyle Menéndez, condenados por el asesinato de sus padres en 1989, enfrentarán una nueva audiencia judicial el próximo 29 de noviembre de 2024, más de 28 años después de haber sido sentenciados a cadena perpetua.
Este anuncio llega solo semanas después de que su historia fuera dramatizada en la serie de Netflix Monsters, que ha reavivado el interés en el caso.
El fiscal de distrito de Los Ángeles, George Gascón, fue quien informó sobre la nueva audiencia en una conferencia de prensa. Durante el anuncio, Gascón reveló que se ha descubierto nueva evidencia que podría modificar el curso del caso de los hermanos Menéndez.
La nueva evidencia y el futuro del caso de los Hermanos Menéndez
Según Gascón, las pruebas incluyen una fotocopia de una carta que uno de los hermanos habría enviado a un familiar, en la que relataba ser víctima de abusos sexuales por parte de su padre, José Menéndez.
Además, también mencionó testimonios aportados por la defensa, en los que un exmiembro de la banda puertorriqueña Menudo alegó que también fue abusado por el padre de los hermanos.
Si bien Gascón aclaró que ninguna de las pruebas ha sido confirmada de manera concluyente, subrayó la obligación moral y ética de su oficina de revisar la nueva información. Esto podría llevar a un nuevo juicio o incluso a una nueva sentencia para Erik y Lyle Menéndez.
“Ninguna de esta información ha sido confirmada”, afirmó Gascón. “En este momento no estamos preparados para decir si creemos o no en esa información, pero tenemos la obligación de revisarla”. Según explicó, el objetivo es determinar si, de haber contado con esta evidencia en su juicio original, el jurado podría haber alcanzado una conclusión diferente.
La nueva audiencia podría marcar un giro inesperado en uno de los casos más mediáticos de la historia criminal de Estados Unidos. Aunque los hermanos han pasado más de dos décadas en prisión, las nuevas pruebas presentadas por la defensa abren la posibilidad de una revisión de su sentencia, incluso cuando ambos ya cumplieron una parte significativa de su condena.
El caso Menéndez: un asesinato que conmocionó a Beverly Hills
El 20 de agosto de 1989, José y Kitty Menéndez fueron asesinados en su mansión de Beverly Hills por sus propios hijos, Erik y Lyle. El crimen conmocionó al país, ya que la familia Menéndez era conocida por su estilo de vida acomodado y su estatus social.
Tras el asesinato, los hermanos continuaron con su vida como si nada hubiera ocurrido, lo que aumentó la fascinación pública por el caso.
En su defensa, Erik y Lyle alegaron que cometieron el asesinato tras haber sufrido años de abusos físicos y sexuales por parte de su padre; sin embargo, el jurado no aceptó esta explicación, y en 1996 fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
A lo largo de los años, los hermanos han intentado apelar su sentencia en diversas ocasiones, pero tanto el Tribunal de Apelaciones de California como el Tribunal Supremo de California han rechazado revisar el caso. Incluso presentaron peticiones al Tribunal de Distrito de los Estados Unidos y al Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito, las cuales también fueron denegadas.
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