CHIAPAS.- Un grupo de 110 inmigrantes guatemaltecos que viajaban en camiones de redilas fueron detenidos por indígenas tzotziles de Zinacantán, al momento que pretendían pasar por la cabecera municipal de ese lugar, con el fin de burlar los puestos de la Policía Estatal que se ubican sobre la carretera Panamericana y carretera de cuota.
Autoridades locales informaron que a las 21:00 horas del lunes (hora de Dios), elementos de seguridad municipal que realizaban patrullajes en la cabecera notaron que en centro del poblado se encontraba un camión de redilas con lona y que transportaba varias personas.
A los pocos minutos, otros dos camiones con las mismas características arribaron al lugar, por lo que procedieron a detenerlos y obligar a los conductores de las unidades a descender, así como a las personas que iban en la parte de atrás.
Al menos tres presuntos traficantes de origen tzotzil, fueron encerrados en la prisión de la Policía Municipal, donde permanecía esta tarde.
Los guatemaltecos, entre ellos una decena de niños que permanecieron en la explanada de Zinacatán, a unos 12 kilómetros de San Cristóbal de las Casas, recibieron alimentos de algunos pobladores y en la mañana del martes, enfermeras y médicos de la clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), llegaron a brindarle atención a algunas de las personas que presentaban algunas molestias.
Después, los extranjeros decidieron huir por las montañas y más tarde aparecieron en la carretera San Cristóbal de las Casas-San Juan Chamula, hasta donde llegaron autoridades municipales y tradicionales, para pedirles que desistieran caminar por la carreteras de ese lugar, porque “aquí es muy peligroso” y pidieron que “mejor regresen a San Cristóbal de las Casas”, a unos 14 kilómetros de distancia.
Pero en el lugar ya permanecían dos visitadores de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) para acompañar a los guatemaltecos en su caminar hacia San Cristóbal de las Casas.
Desde que la Fiscalía General de Chiapas anunció que se reforzarían los retenes que se ubican sobre la carretera Panamericana y carretera de cuota San Cristóbal de las Casas—Chiapa de Corzo, como consecuencia del accidente del 6 de marzo, donde murieron 25 guatemaltecos y unos 40 más resultaron heridos, los traficantes de humanos han optado por usar rutas nuevas para burlar la vigilancia.
En tanto, en Zinacantán, los tres presuntos traficantes que permanecen en poder de las autoridades, pueden quedar en libertad al pagar una multa a las autoridades comunitarias, se informó.
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