TORREÓN, Coahuila.- Un hombre y una mujer fueron asesinados el interior de una vivienda de la colonia residencial Campestre La Rosita y le perdonaron la vida a un niño de 11 años, a quien encerraron en una habitación mientras “revolvieron” los muebles.
La pareja estaba maniatada con cinta canela y tenía el tiro de gracia.
A los hoy occisos los identificó el menor de edad, que es hijo del matrimonio dueño de la residencia que estaba ausente, como Candelario de la Riva Gaytán y María Sandra Morales Núñez.
El joven, identificado como Saíd Jesús, señaló que los fallecidos no tienen relación sentimental, pero que eran empleados de la finca.
Al menor lo hallaron los elementos de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) cuando acudieron a tomar conocimiento del doble homicidio.
Se desconoce quién dio aviso a las autoridades, pero los policías hallaron a la pareja sin vida en el interior del cuarto de servicio, ambos atados de pies y manos con cinta industrial color canela y un balazo en la cabeza.
Al revisar el inmueble, encontraron en una de las habitaciones al joven quien dijo ser hijo de los dueños del lugar y que los mismos andan fuera.
Mencionó que los sujetos, no señaló cuántos, se llevaron a Candelario y María Sandra al cuarto de servicio, a él lo llevaron a una habitación donde lo dejaron encerrado.
Según se conoció, los autores del doble crimen buscaron por todos los muebles e incluso los sillones fueron rasgados con navajas, supuestamente en busca de droga.
En cuanto a Candelario, se dijo que todo indica que andaba en “malos pasos”, ya que se dedicaba a la venta de vehículos usados pero no se descarta que también traficara con sustancias prohibidas.
Hasta el momento persiste el hermetismo en las autoridades, ya que incluso ni la identidad de los fallecidos la han dado a conocer.
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