NUEVO LAREDO.- El próximo 22 de agosto se prevé el final de la canícula, sin embargo, se espera la presencia de la “canícula pequeña” la cual podrá traer desde fuertes lluvias hasta temperaturas muy altas en la ciudad.
Joel Silva Pulido, Jefe de Servicios Hospitalarios de la Dirección de Protección Civil y Bomberos, comentó que cuando finaliza la canícula se presentan fuertes lluvias sobre la región, por lo cual la dirección ha emitido una alerta de precaución para todo el personal por la probabilidad de chubascos y los servicios que requiera la ciudadanía.
“La recomendación cuando inician las lluvias es evitar zonas vulnerables donde se producen encharcamientos y mantenerse al pendiente de indicaciones meteorológicas y de parte de las autoridades y elementos de seguridad”, comentó Silva Pulido.
Agregó también que existe la posibilidad de que descienda la temperatura, sin embargo debido a la alteración meteorológica que se vive durante agosto, septiembre y octubre, es posible también que se vivan días tanto de lluvia y clima templado como de calor.
“Sabemos que en estas fechas también se presenta lo que se conoce como la canícula chica donde también hay variación de clima, es donde se pueden presentar cielo nublado, lluvias fuertes, chubascos y días mucho muy calurosos”, aseguró.
Por lo tanto se recomienda a la ciudadanía mantenerse alerta de cualquier información emitida por la Dirección de Protección Civil y Bomberos y hacer caso a las recomendaciones necesarias.
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