EL PASO.- A tres meses de un tiroteo por motivos raciales que dejó 22 muertos y una veintena de heridos en el centro comercial Cielo Vista, en la ciudad de El Paso, la tienda de la cadena Walmart donde se desarrollaron los sucesos fue reabierta al público.
Una pancarta con la leyenda “El Paso Strong”, desplegada desde el techo de la tienda, se veía cerca de una bandera de Estados Unidos que fue izada la mañana de este jueves, luego de haber permanecido a media asta desde el tiroteo del 3 de agosto pasado.
Izar la bandera “simbolizará que estamos abiertos y listos para los negocios y listos para dar la bienvenida y abrazar a nuestros clientes mientras cruzan la puerta”, afirmó el gerente de la tienda Robert Evans, citado por el diario USA Today.
“Esto es algo que cambia su vida; esto no va a definir nuestras vidas. Pero sí cambió algunas de las cosas emocionalmente”, añadió Evans, de 44 años y quien aseguró que cuando la tienda reabriera regresaría a desempeñar su cargo como gerente, el cual ha ocupado desde hace siete años.
El gerente, originario de El Paso, estaba de pie junto a una de las dos entradas de la tienda, revisando los correos electrónicos en su teléfono, cuando un hombre, que después sería identificado como Patrick Crusius, comenzó a disparar contra la gente, el 3 de agosto pasado.
Evans gritó que había un atacante y anunció un Código Marrón, para después conducir a la parte trasera de la tienda a las personas, a quienes les dijo que corrieran al centro comercial para ponerse a salvo, reportó la cadena CNN.
El gerente destacó que tanto Walmart como el personal de la tienda consideraron que era importante continuar sirviendo a la comunidad de El Paso, por lo que los empleados “han trabajado muy duro para tratar de sacar esta tragedia de su mente y recuperarse de lo sucedido”.
Cuando ocurrió el ataque, Walmart de El Paso empleaba a unas 400 personas, de las cuales, casi todas han regresado a trabajar, mientras que una minoría decidió permanecer en las tiendas a las que fueron transferidas mientras se reconstruía el establecimiento de Cielo Vista.
Se estima que unos tres mil clientes estaban comprando en la tienda de Walmart el 3 de agosto pasado, cuando Patrick Crusius perpetró el tiroteo en el que 22 personas murieron y 26 resultaron heridas.
El 10 de octubre pasado, Crusius se declaró no culpable de todos los cargos en su contra. En caso de ser encontrado responsable del tiroteo, el joven de 21 años podría ser sentenciado a pena de muerte.
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