El ex presidente Patricio Aylwin, abogado de profesión, se convirtió sin querer en el médico que intentó sanar el alma de Chile tras el retorno a la democracia y gobernar durante un complejo proceso de transición luego de 17 años de dictadura.

El político, que jugó un papel importante primero en la llegada de la dictadura de Augusto Pinochet en 1973 y luego en la retirada estratégica de ésta en 1989, falleció a los 97 años de edad.

El ex jefe de Estado, quien encabezó el inicio de la transición a la democracia tras asumir la primera magistratura en 1990, había dejado las apariciones públicas hace varios meses, luego de sufrir sucesivas complicaciones propias de su avanzada edad.

Aylwin sobrevivió a dos gobernantes en cuyas vidas tuvo un papel relevante: Salvador Allende, quien murió en La Moneda tras enfrentar a los golpistas y a Eduardo Frei Montalva, asesinado por el régimen militar en 1982. El difunto ex diputado y ex presidente del Senado, coordinó el apoyo civil a la tiranía y pasados algunos años comenzó a conspirar para llevar a Frei de reprego al Poder Ejecutivo, lo que le costó la vida a su mentor.

Luego, fue el artífice de la alianza entre socialistas y demócrata-cristianos en un acuerdo sobre deslavadas reformas que ayudar a enfrentar la pobreza extrema, pero que no tocaron al capitalismo salvaje imperante el país y sólo lo atemperaron.

El pasado 18 de diciembre, Aylwin fue ingresado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Clínica Alemana de Santiago a causa de una contusión craneana que sufrió al caerse en su domicilio, siendo dado de alta al día siguiente. Luego de eso su estado declinó paulatinamente..

El ministerio del Interior decretó un duelo nacional, de tres días.

En dicho periodo, se fijará el izamiento de la bandera a media asta en La Moneda y en todas las reparticiones públicas, así como en las unidades de las Fuerzas Armadas y Carabineros y la suspensión de los actos y ceremonias de oficiales de carácter de festejo.

Por su parte. Michelle Bachelet señaló que “Chile ha perdido un gran demócrata, un hombre que supo siempre colocar la unidad de los demócratas por sobre las diferencias, que permitió reconstruir un país democrático. Le debemos mucho a don Patricio”.