LAREDO, TEXAS. El domingo por la tarde, un padre vio la escena que jamás se imaginó a su vida, su hijo estaba muerto.
Se trata de un cazador que falleció a causa de un balazo cuando éste se encontraba dentro de un parapeto.
A las 6:30 de la tarde se informó sobre este deceso, ya que un padre fue quien encontró a su hijo sin vida en Los Botines, poblado que se ubica sobre la carretera 83 Norte a unos 30 kilómetros de Laredo.
Los alguaciles del condado de Webb llevan a cabo la investigación y cuando se entregan los resultados de la autopsia se podrán saber más detalles de este deceso.
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