NUEVO LAREDO.- Inicia el mes de noviembre y con él viene el tradicional pan de muerto, aquella pieza que se remonta a la época prehispánica, que enfatiza la cultura mexicana y que acompaña la celebración del Día de Muertos.
Francisco Ángeles, originario de Poza Rica Veracruz, lleva alrededor de 30 años dedicándose a la elaboración de este pan, y más de 8 años visitando la ciudad de Nuevo Laredo para la venta del mismo.
Asegura que la preparación de esta hogaza es algo que lo acompaña desde siempre, puesto que le han enseñado a valorar la tierra, sus costumbres y aquello que la representa.
“Es una tradición muy de mi tierra, se da mucho en nuestra cultura y es a base de harina, huevo, mantequilla, sal, levadura, rellenos con nuez, pasas y más. Es una elaboración tardada pero muy bonita. Puede tardar entre 4 a 5 horas de proceso pero el resultado final vale la pena”, dice.
Destaca que esta pieza de pan comienza desde que la harina toca la máquina, el proceso de mezcla de ingredientes, el horneado, la barnizada y finalmente la espolvoreada con azúcar y canela.
“En Poza Rica se da mucho porque es de acuerdo con la creencia de los fieles difuntos, nosotros les ofrendamos a nuestros seres queridos”, señaló.
Diariamente este padre de familia y quien se mantiene al frente del local conocido como “Pan, Rico Pan”, elabora alrededor de 100 a 150 piezas.
Para aquellos amantes de las tradiciones e interesados en adquirir estas piezas de pan pueden ubicar a Don Francisco sobre la calle Madero y Ocampo, de 10 am a 10 pm.
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