Joan Sebastian, seA�alado por vA�ctimas de trata

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marzo 2 2017, 10:35 am

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CIUDAD DE MA�XICO.-A�Poco despuA�s de cumplir 12 aA�os, a�?Amandaa�? fue convertida en mensajera de Los Rojos: un hombre, al que apodaban El Boloncho, la utilizA? primero para enviar drogas y armas a diversos puntos del estado de Morelos.

MA?s adelante El Boloncho la explotA? sexualmente en un prostA�bulo de Taxco en el que, segA?n la averiguaciA?n previa PGR/SEIDO/UEITMPO/164/2014, el grupo criminal ofrecA�a a los clientes niA�as y adolescentes de entre dos y 20 aA�os de edad.

SegA?n la declaraciA?n de a�?Amandaa�?, las a�?chicasa�? (como llamaban en el burdel a las menores de nueve aA�os) habA�an sido arrancadas en su mayor parte a migrantes centroamericanos que al cabo fueron asesinados.

Las a�?grandesa�? (de diez aA�os en adelante), solA�an ser enganchadas del mismo modo en que El Boloncho se apoderA? de a�?Amandaa�?, a la salida de la escuela y bajo la amenaza de que su padre y hermana serA�an asesinados si ella se negaba a cumplir con lo que le ordenaban.

El 19 de junio de 2014, a�?Amandaa�?, en compaA�A�a de la representante de una organizaciA?n contra la trata de personas, y en presencia de una sicA?loga y dos testigos de asistencia, declarA? ante la Unidad Especializada en InvestigaciA?n de TrA?fico de Menores, Personas y A�rganos de la PGR que en una ocasiA?n entrA? a las habitaciones en que se encontraban las a�?chicasa�? y a��citA? textualmente la declaraciA?na��, a�?estaba ahA� el artista Joan Sebastiana�?.

De acuerdo con el documento, a�?Joan Sebastian les decA�a a las a�?chicasa�� que ellas eran sus princesas y A�l las cuidarA�a como su papA?a�?. SegA?n a�?Amandaa�? les regalaba zapatillas y a�?compraba los accesorios de todas, todo en oroa�?.

Un aA�o mA?s tarde, el ocho de junio de 2015, se presenta a declarar ante la SubprocuradurA�a Especializada en InvestigaciA?n de Delincuencia Organizada otra vA�ctima de trata, a�?Julietaa�?.

HuA�rfana de padre, al cumplir 16 aA�os es obligada por su madre a salir a la calle a conseguir empleo. Encuentra una oferta en un bar de Cuernavaca. El trabajo consiste en a�?preparar micheladas y cobrarlasa�?. El sueldo es de 700 pesos a la semana. Su madre acepta feliz.

AsA� comienza el descenso a la oscuridad. Una mesera apodada Azul lleva a a�?Julietaa�? a un antro de Temixco: el Sexto Sentido. Le dice que solo tendrA? que beber con los clientes y bailar en la pista. GanarA? diariamente entre mil 300 y tres mil pesos.

Un dA�a, Azul le propone otro negocio: ir como a�?damas de compaA�A�aa�? a una casa en la que habrA? una fiesta. En una camioneta negra, cinco muchachas son recogidas por un hombre que tiene tatuados varios puntitos en la mano derecha a��a�?cada punto era una persona que habA�a matadoa�?.

En esa fiesta estA?n Edgar Valdez Villarreal, La Barbie, y varios de sus hombres: El Negro, El Guacho, El Rulo, El Seven. Hay un individuo al que le apodan El Barbas (no parece tratarse, sin embargo, de Arturo BeltrA?n Leyva).

Es el 2 de noviembre de 2009.

DespuA�s de beber un buen rato, una de las jA?venes, Nicole, pasa con La Barbie a la parte de arriba. a�?Julietaa�? entra a otra recA?mara con El Negro. En un momento determinado se escuchan los gritos de Nicole, y despuA�s un disparo. De la habitaciA?n de La Barbie sacan cargando el cadA?ver de la joven. a�?Julietaa�? se entera despuA�s de que Nicole no quiso cumplir con los deseos del capo.

DespuA�s de aquella noche, El Negro declarA? que a�?Julietaa�? habA�a pasado a ser a�?fijaa�?: nadie mA?s podA�a tocarla. La dejarA�an bailar en la pista, pero no hacer bailes privados, ni ofrecer a�?servicios especialesa�?.

Las jA?venes del Sexto Sentido fueron solicitadas poco despuA�s para dar servicio en un rancho. Era, de acuerdo con su testimonio, el rancho de Joan Sebastian. Los tratantes le habA�an mostrado un A?lbum de fotos con chicas, recuerda a�?Julietaa�?, y el cantante habA�a elegido a las que querA�a en la fiesta.

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