El fin de semana libre de taxas en la vecina ciudad, benefició a los comerciantes de Nuevo Laredo, donde muchos se avocaron a instalarse en el puente internacional número II, el cual se  saturó de vehículos que tardaban hasta dos horas en cruzar y consumían lo que se vendía cerca de la fila.

Entre los productos que mayor demanda presentaron, se encontraban las aguas frescas, raspas, frituras y agua embotellada además de frutas frescas; aunque no faltaban los vendedores de  figuras religiosas, sombras para ventanillas de coche, sombreros entre otros artículos.

Uno de los comerciantes, Emmanuel Pérez, quien comercializaba adornos para automóviles, comentó que las ventas les favorecen a todos cuando el puente se satura y cruzan lentamente.

Entre algunas de las dificultades que tienen los comerciantes que se ubican en este sitio, se encuentra primeramente el riesgo de sufrir algún accidente al recorrer las filas entre los autos, además  del retiro del lugar cuando llegan los elementos de seguridad federal, esto a petición de autoridades de Laredo Texas.