Asistimos a un escenario algo extraño en lo relativo a tecnología de consumo. Los llamados smartphones de gama alta dan sensación de agotamiento. Solo Apple, con sus iPhone, se mantiene gracias a su defensa de su ecosistema cerrado, mientras firmas como Samsung o Sony sufren los vientos de cambio. Los cada vez más potentes dispositivos de gama media, empujados por su fabricación china, están cambiando el panorama.

Ajenos a este fenómeno, la feria Consumer Electronics Show (CES), que se celebra esta semana en Las Vegas (6-9 de enero), mostrará los nuevos ingenios y las propuestas que inundarán el mercado a lo largo del año, entre los que destaca la cada vez más presencia de empresas procedentes del sector de la automoción, aunque se mostrarán las últimas novedades en drones y dispositivos wearables, que prometen ser algunas de las estrellas de esta edición, que acogerá a unos 3.700 expositores y más de 170.000 visitantes de 150 países en sus 205.000 metros cuadrados de exposición.