CIUDAD DE MÉXICO.- Al cumplir un año a la cabeza de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Rosario Piedra Ibarra difundió un informe a través de un video en el que aceptó que durante su gestión se ha descuidado la atención oportuna a las víctimas de algún tipo de abuso, específicamente, a las victimas de trasgresiones que tienen que ver con el género.
En el marco de su primer informe, la titular de la CNDH admitió que en este primer año al frente de tal organismo se le han presentado diversas dificultades, las cuales le han impedido, en cierta medida, bridar la atención deseada a todas aquellas personas que acuden a presentar denuncias en contra de atropellos cometidos hacia su integridad.
Así mismo, Piedra Ibarra puntualizó que entre los obstáculos a los que se ha tenido que enfrentar, está el hecho de tener que cortar de tajo con las “inercias y prácticas arraigadas”. A su vez, quizá la más preocupante de estas trabas, es que le ha hecho frente a la “falta de entendimiento y de compromiso “por parte de las personas que en un principio se habían sumado al proyecto.
La titular de la CNDH aseveró que 3 de sus principales preocupaciones durante su primer año al frente de esta comisión son: la atención a las familias de los desaparecidos, el caso de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa y el incremento de la violencia hacia el género femenino.
En relación a los abusos cometidos en contra de las mujeres, Rosario Piedra se vio en la necesidad de reconocer que se han presentado omisiones y descuidos en la atención a las exigencias y demandas de las mujeres afectadas por la violencia con razón de género, las cuales se comprometió a corregir.
“Desde luego también hubo una parte de descuido y omisiones frente a las demandas de las víctimas, y por lo que toca a nosotros, lo asumimos como una oportunidad de hacer rectificaciones y mejorar nuestro trabajo. Lo que sí quiero decir es que a todas las víctimas cuyas demandas motivaron la toma de nuestras instalaciones, se les ha atendido, y se les sigue acompañando”, reconoció la hija de Rosario Ibarra de Piedra.
En este sentido, mencionó que en la toma de la CNDH por parte de diferentes colectivos feministas acaecida en meses pasados, el enemigo a derrotar no era ni la institución a las que representa ni ella misma, puesto que aseguró que desde que ella se hizo cargo de la CNDH las puertas de esta están completamente abiertas para todas y todos.
“Nosotros no somos el enemigo a vencer, somos aliados de todas y todos aquellos que buscan la justicia y la verdad (…) es mil veces preferible correr el riesgo de que pasen cosas como estas, la toma de instalaciones, que regresar a las instituciones de fachada, que aparentemente “servían al pueblo, pero que siempre permanecieron cerradas al pueblo”, subrayó Piedra Ibarra.
En este tenor, la titular de la CNDH adelantó que se está replanteando el Programa de Atención a Víctimas, el cual se enfocará en el abordaje a las mujeres que hayan sido afectadas por la violencia de género. Esta reforma buscará que las instalaciones de la CNDH sean consideradas como un lugar en el que cohabiten las organizaciones, los colectivos y los planteamientos y organismos gubernamentales.
Por su parte, al respecto del caso de los 43 normalistas a los que desaparecieron en 2014, Piedra Ibarra aclaró que se había tomado la decisión de deshacer la Oficina Especial del Caso Iguala, puesto que se estaban presentado deficiencias en cuanto al debido seguimiento de las demandas interpuestas por las madres y padres de los jóvenes desaparecidos.
Aunque reconoció que a partir de septiembre de este año, no había habido prácticamente ningún nuevo avance en este sentido, dijo que ya comenzaron de nuevo a retomar los trabajos de digitalización de los expedientes de las quejas, esto con el propósito de que haya una verdadera protección y trasparencia en los datos personales, tanto de las víctimas como de sus familiares.
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